“Empresas latinoamericanas se destacan en la implementación de la agenda 2030 de la ONU”
En el mes de abril se dieron dos reuniones clave en nuestra región, una en Chile y otra en Argentina, que ofrecieron indicios del paso firme con el que avanzan los gobiernos y las empresas latinoamericanas en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (2015-2030) aprobados por Naciones Unidas.
Por un lado, Alicia Bárcena, secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), presentó en una reunión en Chile, los resultados del segundo informe anual que analiza el progreso de los gobiernos de nuestra región para incluir los ODS en sus estrategias nacionales. La Secretaria destacó el avance en poner en marcha instituciones a nivel nacional y municipal para aplicar los ODS. Asimismo, indicó que se está logrando diseñar e implementar indicadores de seguimiento e informes voluntarios de avance. “Cerca de 20 de 33 países de América Latina cuentan con mecanismos nacionales para coordinar la implementación de la Agenda 2030, esto es un buen indicio de avance”, indicó Bárcena.
Pese al progreso, se propuso que todavía hay deudas pendientes en materia de mecanismos de seguimiento estadístico ya que la disponibilidad de indicadores sigue siendo muy heterogénea entre los países de América Latina, dificultando su comparabilidad.
Por el lado de las empresas, Lise Kingo, directora Ejecutiva del Pacto Global, presentó en el evento “Making Global Goals Local Business” en Buenos Aires el Informe “Empresas y ODS: Un análisis del progreso en América Latina”.
En este informe se destaca que una abrumadora mayoría de las empresas de la región –80 por ciento- informa estar tomando medidas para avanzar en los ODS, en comparación con el 74 por ciento de las empresas en el resto del mundo, remarcando el liderazgo de América Latina.
Las acciones empresariales se concentran principalmente en implementar asociaciones y alianzas entre sectores (61%) y en alinear su estrategia comercial con uno o más ODS (51%). Se indicó además que los ODS más priorizados fueron el ODS 8 de Trabajo decente y crecimiento económico; el ODS 3 de Buena salud y bienestar; y el ODS 4 de Educación de calidad.
Kingo finalmente remarcó algunas deudas pendiente del sector corporativo latinoamericano, como el desafío de mejorar las evaluaciones de riesgo e impacto, esenciales para comprender los problemas materiales, la huella de la compañía en la sociedad y el ambiente, y para desarrollar una estrategia específica basada en esta información.
Resta entonces que las empresas latinoamericanas activen sus equipos para responder a estos desafíos pendientes y así seguir liderando el camino al cumplimiento de esta agenda ambiciosa que se propone alcanzar para el año 2030 sociedades más justas e inclusivas, en las que se protejan los derechos humanos, el planeta y sus recursos naturales.
