Álvaro Bazán Auza
DIRECTOR EJECUTIVO
Corporación Boliviana de RSE
(COBORSE).
La Responsabilidad Social Empresarial enfrentando nuestros miedos
Si algo tenemos en común los humanos y por ende las instituciones que creamos, es el temor al cambio, cuanto más temor e inseguridad experimentamos los individuos, más deseamos que nos protejan el estado y las instituciones que lo sustentan (o Del Estado y las Instituciones que lo sustentan). Además, cuando vivimos con miedo nos sentimos mucho más vulnerables y amenazados. Y al buscar todo tipo de seguridades y certezas, cerramos las puertas de nuestra mente y nuestro corazón a lo nuevo y lo desconocido.
Sin embargo, si tuviéramos más capacidad para cambiar, seguramente conseguiríamos mejores resultados. Las empresas gastan millones en gestionar cambios, en moverse de un punto X a un punto Y, en lograr que las personas asimilen psicológicamente el cambio y se sientan cómodos con la nueva situación.
Hay algo que es evidente, una empresa puede crecer o decrecer, pero no mantenerse igual. ¡Qué difícil es lograr estabilidad empresarial! y qué fácil es perderla… Siendo así, uno tiene que orientar su brújula hacia el Norte que considere más oportuno, con visión clara y con determinación, sin tener miedo a los cambios.
En lo que respecta a la Responsabilidad Social Empresarial, el empresariado nacional está avanzando en esa dirección, ha puesto su brújula en la dirección correcta, ha perdido el miedo al cambio que implica pasar de la gestión enfocada únicamente en los resultados económicos, a la gestión que busca resultados social y medioambientalmente responsables también.
El paso histórico lo ha dado la entidad más representativa del empresariado nacional, la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, que ha decidido liderar el movimiento y marcar el rumbo, lo ha hecho con un gesto simbólico muy importante, asumir la Secretaría Técnica del Pacto Global de las Naciones Unidas, a partir de ello, que es un punto de partida, se espera que las intenciones comiencen a convertirse en resultados.
Eso está para verse aún, pero por lo pronto, el miedo se ha perdido.
