La UPB inició un nuevo ciclo educativo basado en cuatro cimientos en los que la formación docente se enfocará hacia el futuro para mejorar el aprendizaje y la estabilidad emocional.
La Universidad Privada Boliviana (UPB) nunca deja de innovar y de adaptarse para brindar a sus estudiantes la mejor calidad educativa, así como las mejores condiciones para que el aprendizaje sea estimulante y llevadero. Por eso, partir de este 2021, se ha replanteado los parámetros que gobiernan la enseñanza, con miras a optimizar el proceso.
Dos de estos pilares están relacionados con el efecto de la actividad docente en los estudiantes, con su nivel de motivación de y profundización en la materia. Los otros dos determinan la competencia del profesorado a partir de la eficacia de la enseñanza y la competencia emocional.
En palabras de Alberto Sanjinés, Vicerrector Académico del Campus de Cochabamba: “El docente es clave en su actitud y en el modo en el que despierta interés en los estudiantes. Por eso la motivación es un pilar fundamental que trabajaremos este año. El segundo aspecto consiste en la capacidad de desarrollar un conocimiento significativo. Según estudios, que sabe poco de muchas cosas, y el estudiante profundo, que aprende con pensamiento crítico y razonamiento complejo.”
El tercer pilar se basa en la eficacia de la enseñanza, cabe aclarar que este concepto puede variar según el punto de vista. Los estudiantes sienten que aprenden mejor y se sienten más motivados por los maestros que hacen más llevadera la lección. Para los profesores, en cambio, la preocupación se centra en la preparación y presentación del contenido.
“Yo lo resumiría de esta forma: la eficacia es alcanzar los objetivos que nos hemos propuesto, lograr que los estudiantes aprendan aquello que nosotros hemos trazado, porque creemos que es importante”, afirmó Sanjinés al respecto.
Para la autoridad académica, los tres primeros lineamientos están mediados por el aspecto de la competencia emocional. El estudiante debe sentir que la experiencia le da seguridad y equilibrio emocional: “Esta capacidad parte de la inteligencia emocional; tenemos que reconocer nuestras emociones en nosotros mismos y saber cómo expresarlas y controlarlas. A la larga, tenemos que emplear todo eso para tener una vida de bienestar”.
El delineamiento de estos cuatro pilares de la docencia de excelencia apunta a formar profesores que motiven a los estudiantes hacia la mejora continua, el aprendizaje profundo y el entusiasmo por el conocimiento.
Las inscripciones para este año ya están abiertas. Para mayor información, se puede visitar las plataformas de redes sociales o la página oficial de la Universidad Privada Boliviana: https://www.upb.edu/