La UPB empezó un nuevo año tuitivo, replanteándose los alcances de la educación remota y poniendo en práctica las lecciones aprendidas durante el dificultoso año de la pandemia.
La Universidad Privada Boliviana (UPB) ha vuelto a certificar su puesto como el primer centro de estudios superiores privado del país. Su respuesta efectiva y responsable ante la situación de pandemia mundial ha sido una clara demostración de esta posición, tras activar un modelo multimodal de estudios y crear becas a nivel nacional para que los mejores estudiantes tengan acceso a sus grandes ventajas.
El éxito obtenido en rankings especializados y una importante inversión en infraestructura confirman este posicionamiento junto a los logros alcanzados por sus alumnos graduados. Sus tres campus, localizados en Cochabamba, La Paz y Santa Cruz, están equipados con aulas bimodales, plenamente adaptadas para impartir lecciones en línea y clases presenciales regulares.
Para Oscar Molina, Vicerrector de la universidad, el objetivo fundamental de la UPB es mantener los estándares de calidad que los caracteriza: “Nuestro modelo multimodal tiene varios componentes; uno de ellos son las clases sincrónicas. Por su puesto que a lo largo de este año de pandemia, hemos ido mejorando los procesos, desde la capacitación a los profesores o las constantes charlas con los estudiantes”.
El modelo multimodal tiene previsto realizar actividades presenciales, especialmente en lo relacionado con el laboratorio. Para ellos, los tres campus se han preparado para recibir a esos estudiantes con las mejores condiciones de bioseguridad. Asimismo, se ha realizado inversiones significativas en tecnología, para contar con todas las plataformas necesarias para las transmisiones. Las aulas WoW (por las siglas del célebre juego World of Warcraft) representan un espacio académico que permite a los docentes contar con la presencia de todos los estudiantes en vista panorámica.
“Sin duda, hemos aprendido mucho en el camino. El 2020 no todos los profesores estaban equipados para dar un salto en esta situación, que por supuesto también afecta a los estudiantes en cuanto a socialización. En ese sentido hemos tratado de compensar en un grado con una serie de actividades deportivas, culturales y de recreación”, afirmó Molina con respecto a las medidas tomadas desde el año pasado
Para la autoridad académica, ha habido un grado de complicación y de compromiso para todas las universidades del país dependiendo del avance que tenían en cuanto a infraestructura para incorporar otras modalidades. Ha sido un proceso importante para la educación superior en Bolivia, porque ha obligado a muchas instituciones a dar un salto tecnológico y a actualizar sus metodologías de enseñanza de cara al futuro.
De cara a la era digital, la Universidad Privada Boliviana (UPB) se prepara para realizar varios ajustes graduales hasta el año 2022. Entre ellos cabe destacar su objetivo de incorporar una licenciatura “minor” en Análisis de datos y digitalización para todos los campus del centro de estudios.
Las inscripciones para este año ya están abiertas. Para mayor información, se puede visitar las plataformas de redes sociales o la página oficial de la Universidad Privada Boliviana: https://www.upb.edu/